Válvula de admisión de coche

La válvula de admisión hace parte de la categoría de las válvulas de intercambio de gas, que suministran los cilindros con el aire en un motor diesel o una mezcla de combustible y aire en un motor de gasolina. Con eso, se abren uno o más canales, para que la mezcla quemada pueda completamente y con pérdidas mínimas dejar el cilindro.

La válvula de admisión está expuesta térmicamente menos que la de escape, ya que la temperatura del aire o de la mezcla es menor en comparación con los gases de escape. En los siguientes tactos de las válvulas, la habitación cilíndrica debe estar sellada.

La válvula de admisión puede ser cerrada a lo máximo por dos muelles, para que los gases puedan fluir. Está compuesta de un eje y una placa con un sólo bisel mecanizado de 45 °, pero a veces con un ángulo menor. El bisel se ajusta exactamente a los asientos de la válvula, que se comprime en la culata como un anillo.

Normalmente, en la válvulas de admisión la temperatura de entrada alcance aproximadamente unos 500 ° C, en cuanto a los de escape unos 600 0С, pero no superior a 700 ° C. Debido a la alta tensión y corrosión, las válvulas de admisión son fabricadas en acero, de silício y cromo. A pesar de todo, ellas se desgastan y es menester sustiturlas.

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Cómo detectar averías en la válvula de admisión

Este componente se comprueba en dos fases. En primer lugar, se revisan todos los sistemas en un banco especializado con la ayuda de un ordenador.

Entonces, el sistema se desensambla y la válvula se desmonta. Inspeccionamos los componentes para comprobar la ausencia de depósitos de carbono y de daños mecánicos. Se deberá prestar una atención especial al ajuste de la válvula, y a su posición en el asiento. Antes de proceder a esto, hay que enfriar el motor. A continuación, ponemos el pistón en el punto muerto superior del recorrido de compresión. A continuación, aflojamos la segunda tuerca atornillada después de la principal, y ajustamos la holgura utilizando un calibre para ello. El espacio óptimo debe permitir que el medidor entre con un esfuerzo perceptible.

Hay que tener en cuenta que las válvulas no se pueden ajustar de manera separada a los otros componentes. Así que, después sustituir la válvula, recuerda volver a poner el componente nuevo en su lugar.

Puede notarse cuando la válvula de admisión necesita de diagnóstico por los siguientes síntomas:

• el motor da golpes y se escuchan otros ruidos extraños en todos los modos de funcionamiento;
• fallos del arranque del motor;
• consumo de combustible aumentado;
• el motor funciona de manera incorrecta a bajas revoluciones y se detiene espontáneamente a ralentí;

Razones para un funcionamiento erróneo de la válvula de admisión

Un funcionamiento erróneo o una avería completa del componente puede estar causada por el uso de combustible o aceite de motor de baja calidad. El uso de gasolina de bajo octanaje lleva a una resistencia baja del combustible, lo que se traduce en una carga alta al grupo de pistones. En consecuencia, la temperatura de funcionamiento del motor aumenta. También se acumulan depósitos de carbono en la culata de la válvula, que después de alcanzar cierto espesor, se separan y se meten entre el asiento y la base de la válvula. Esto se traduce en un sobrecalentamiento de la culata de la válvula y en el deterioro de contacto con el asiento.

En muchas ocasiones, la razón del fallo de funcionamiento de este componente es el aumento o disminución del espacio de separación entre el asiento y la válvula. Cuanto mayor sea la distancia, más rápido se desgastará provocando el fallo del motor. Si el espacio es inferior a lo normal, la válvula de admisión deja de realizar sus funciones correctamente. Por lo tanto, el combustible no entrará en los cilindros a tiempo. La utilización de un vehículo con las válvulas cerradas resulta en un sobrecalentamiento del motor y en el fallo prematuro de los cilindros.

La razón por la que se puede quemar la válvula de admisión puede ser un encendido demasiado temprano o tardío. Por lo tanto, si la pieza falla, será necesario asegurarse de que el ángulo de avance del encendido es el correcto.

Sustitución de una válvula de admisión

La reparación no puede eliminar ni siquiera los más insignificantes defectos de la válvula, por lo tanto es conveniente sustituirla.

Para desmontar el componente, primero quitamos la correa y la tapa del árbol de levas. Se recomienda anotar la secuencia de los balancines y de los compensadores con un rotulador.

Para apretar los tornillos de la tapa del árbol de levas, utilizaremos una llave de torsión. El par de apriete debe ser sólo de 10 Nm.

Para que las válvulas se desgasten de manera uniforme, debemos colocar todos los componentes a la vez.